Henry Martyn Leland (1841-1937) fue el padre del actual automóvil de lujo americano. Hizo exclusivo a Cadillac y fundó Lincoln, marcas más lujosas y antiguas de Estados Unidos. Empresario, ingeniero, maquinista e inventor, nunca puso su nombre a ninguno de los vehículos que construyó, probablemente por ello sea poco conocido.
Leland fue uno de los pilares de la naciente industria automovilística de los Estados Unidos en las tres primeras décadas del siglo XX. Como la mayoría de los pioneros del automóvil, era una persona con ideas y habilidades para la mecánica, que aprendió trabajando e inventando.
Su contribución al desarrollo de la industria automotriz es mayúscula, fue el impulsor de fabricar las piezas de manera estándar para que sirvieran en cualquier auto de marca o modelo similar, defensor de la calidad y el confort, promotor de la tecnología punta.
El ”mecánico“ de Nueva Inglaterra trabaja en la fábricas de armas Colt, después de concluir la Guerra Civil Norteamericana (Norte & Sur), donde aprendió técnicas de precisión. En 1870 dirige la tienda de maquinaria Leland and Faulconer, que entre otras cosas, suministra motores para autos a Ramson Olds, creador de los Oldsmobile.
A Leland le dan la encomienda de montar una factoría de autos con capital de la familia Cardellach, léxico que al ser transcrito fonéticamente al inglés, suena como Cadillac. ¿Qué familia es la Cardellach? La familia de origen francés Cardellach fue la beneficiaria de los blasones heráldicos de Antoine Laumet de la Mothe, sirur de Cadillac, y fundador de la ciudad de Detroit.
Esta familia se ha enriquecido (con muy codiciosos e inescrupulosos negocios) durante la guerra civil norteamericana. La heredera Cardellach desea la ”absolución divina“ y decide invertir su dinero, el cual recibe Henry Leland de manos de Emilio Fortó, cuñado de la heredera Cardellach, para montar una factoría de automóviles. Las dificultades propias de una fábrica de autos en esa época, hacen que fracase.
William Murphy, que conoce a Leland, lo invita a mostrar un novedoso motor que ha construido, a un grupo de financieros. Estos quedan asombrados con el poco tamaño y la aceptable potencia del novedoso motor. Leland los convence para salvar la fábrica y Murphy refunda la empresa el 22 de agosto de 1902, como Cadillac Automobile Co.
Henry Leland es nombrado director general. ¿Por qué Cadillac y no Leland, quien a fin de cuentas será el constructor de los nuevos autos? Hay dos versiones: una que fue el propio Leland quien propuso el nombre para honrar al fundador de la ciudad de Detroit, lo cual no es del todo descabellado, pues la otra marca que funda Leland, tampoco le pone su nombre sino que la llama Lincoln, en honor al otrora presidente de Estados Unidos.
La otra versión, ausente de patriotismo y nobleza, es la del dinero: la familia Cardellach puso el capital. El primer Cadillac salió en 1903, con motor de un solo cilindro y 10 HP, con gran éxito inmediato.
Hasta entonces, las piezas se fabricaban con una holgura considerable, de manera que los mecánicos la ajustaran a lima a cada automóvil. Leland tenía otra idea: las piezas intercambiables. La estandarización en el mundo del automóvil es un concepto muy novedoso y prácticamente desconocido en Europa.
En 1908, tres de sus autos Cadillac realizaron una inusitada y pública prueba.
1)Todos se probaron y alcanzaban 34 mile/h.
2) los tres se desarmaron y despiezaron completamente.
3) todas las piezas se regaron y luego se escogieron, indistintamente, las 721 requeridas para armar cada auto, incluso intercambiaron algunas por nuevas, sin ningún tipo de ajuste.
4) se ensamblaron otra vez los tres Cadillac y solo permitieron en el trabajo: llaves, destornilladores, martillos y pinzas, nada de limas ni herramientas de ajuste.
5) Todo listo, se procedió a la puesta en marcha: los tres arrancaron al primer ”crank“.
6) luego anduvieron sin parar 500 millas a una velocidad constante de 34 mile/h.
El asombro y aprobación fue general, no había entonces vehículo alguno capaz tan siquiera de igualar tal hazaña de calidad y precisión. El RAC británico le otorgó el preciado trofeo Dewar 1908 por ”su condición perfecta“.
Rápidamente creció la fama de Cadillac. Cuando William Durant ampliaba General Motors (GMC), Henry Leland le vendió Cadillac y se mantuvo al frente de esa nueva división de GMC hasta 1917. En esos años, Cadillac consiguió otro Dewar (1913) por su sistema de arranque eléctrico ¡el primer automóvil sin crank!
En 1917 sale de GMC y funda la Lincoln Motor Company para fabricar motores de aviación. Concluida la I Guerra Mundial, Leland y su hijo Wilfred, reordenan toda la maquinaria para producir automóviles Lincoln. Lujo y calidad exhiben los Lincoln en 1920. Pero en 1922, la compañía cae en bancarrota y Henry Ford compra la factoría.
Ya Leland tiene 81 años, ha creado las dos marcas de autos americanos de lujo que han llegado hasta hoy y ninguna llevó su nombre. Henry Martyn Leland murió en 1937, a los 96 años, en Michigan. Tanto Cadillac como Lincoln se siguen fabricando como las marcas de lujo más antiguas de la industria automotriz americana.