Dos norteamericanos, Phil Weicker y Duncan Foster, que en ese entonces estaban en una universidad de Canadá, idearon una loquísima idea. Ocho años más tarde, en 1996, se compraron un Cadillac Coupe Deville 1969 y crearon "el jacuzzi más rápido del mundo".
El auto comprado por ellos, en 800 dólares, estaba a la venta para chatarra, ellos lo modificaron, le sacaron los asientos, le colocaron las instalaciones propias de un hidromasaje, y modificaron la transmisión convirtiéndolo casi en un barco aunque el agua estaba dentro y no fuera. Un motor V8 sirve no solo para mantener en movimiento el auto, sino para mantener caliente y en movimiento el agua del jacuzzi. Este divino jacuzzi fue bautizado con el nombre de CARPOOL DEVILLE. Acondicionaron el panel de relojes para que resistiera el agua y colocaron manijas estilo barco, para controlar la caja de cambios. Alcanza una velocidad de 80 km/h.
Demoraron seis años en materializar la idea. Restauraron la carrocería, el motor y crearon el jacuzzi de fibra de vidrio. También tuvieron que hacer que el resto del sistema del carro operara. El color original del coche chatarra era tipo café con leche y ellos le dieron colores azul piscina, algo más oscuro adentro y más claro por fuera.
El auto también puede utilizarse en el interior de un recinto, sin manejarlo o también ir por la calle mientras nos damos un buen baño y manejamos.
Créditos
Ana París