El piloto español Marc Márquez firma el triunfo 300 de Honda y se afinca, en el circuito francés de Le Mans, en la cima del Campeonato Mundial de Moto GP.
Después de las 27 vueltas al legendario circuito de Le Mans, Marc Márquez volvió a dejar muy claro que para arrebatarle la corona hay que contar con una máquina igual de potente que su Honda, y una maestría superior a la que ha exhibido durante las primeras cinco paradas del Campeonato Mundial de Moto GP.
Su convincente victoria en el Gran Premio de Francia llevó a la escudería japonesa hasta su triunfo 300 en la máxima cilindrada y llegó como una prueba más de la solvencia con que el piloto español ha dejado sin opciones a sus rivales, pendientes siempre de un fallo –como el de Austin- para tener opciones de triunfo. Casi una humillación para el resto de la parrilla.
En el circuito galo hubo pelea, pero solo durante los primeros tramos. Partiendo otra vez desde la pole, el líder de Honda tensó el pulso con un Jack Miller bastante incómodo, y la batalla vivió interesantes capítulos como las tres pasadas que protagonizaron en la octava vuelta, punto de quiebre para el desenlace de la carrera.
Por detrás se acercaban la Ducati de Andrea Dovizioso y la Yamaha de Valentino Rossi, y advertido el catalán del asedió, exigió lo necesario a su máquina para rodar sobre los 1.32 bajos en cada vuelta y así amasar un colchón de dos segundos que administró magistralmente hasta la bandera a cuadros.
Fue la primera vez que Marc impone su ley con neumáticos blandos y la escena final, sobre una rueda en la línea de meta, fue una postal de su contundencia, madurez y comodidad sobre la RC213V, a pesar que no era el de Le Mans un circuito óptimo para explotar sus mejores prestaciones.
Allí suelen mandar las Ducati, que esta vez rodaron lo suficientemente bien para completar el podio, con Dovi por delante de Petrucci, quien por fin abraza su primer podio de la temporada. Más atrás otra máquina de la fábrica italiana, la manejada por Miller, ratificaba la buena vibra de las Desmosedici sobre al asfaltado francés, y dejaba para el siempre presente Rossi la quinta posición.
El desenlace bajó a la Suzuki del español Alex Rins –décimo tras salir en el puesto 19— a la tercera posición del escalafón, a la espera de lo que pueda pasar el próximo 2 de junio en Mugello, durante el Gran Premio de Italia.
Posiciones Mundial Moto GP