Aunque todo estaba prácticamente decidido desde la contrarreloj individual, hoy se confirmó la noticia: José Mojica sigue siendo el rey del Clásico ciclístico cubano, tras completarse la duodécima etapa con un embalaje masivo frente a la sala polivalente Ramón Fonst, de La Habana, ganado por el anfitrión Leandro Marcos.
Tras salir del poblado de Los Palacios, en la provincia de Pinar del Río, el pelotón estuvo compacto durante los 123 kilómetros que tenía el trayecto y solo hubo «acelerones» en las metas volantes, para deleite de la afición que vitoreaba el paso de la caravana multicolor.
En la primera meta volante, ubicada en San Cristóbal, el artemiseño Félix Nodarse fue el primero en cruzar, delante de Willy González y Jesús Baragaño. Luego, en Guanajay, Leandro Marcos dejó claras sus intenciones de ser protagonista en la última fecha y se agenció el primer lugar, seguido por su compañero de equipo, Frank Rodríguez y el guantanamero Javier Revillo.
Casi llegando a la meta se fijó la tercera meta volante, en la Ciudad Deportiva, la cual dominaron Alai Rodríguez (Mayabeque), Maikol Hernández (Holguín) y Yoandri Tounset (Guantánamo), por ese orden.
Así quedó todo listo para el último tramo de la etapa y del giro: Leandro Marcos le regaló a la afición de su ciudad el lugar más alto del podio dominical, tras 3:57.52 horas de bregar. Onel Santa Clara y Félix Nodarse, respectivamente, ocuparon los otros dos puestos de la vanguardia, con el mismo tiempo del vencedor.
Curiosamente, Leandro había sido tercero en la última etapa en 2014 y segundo el año pasado, por lo que ahora, como se dice en el beisbol, completó la escalera. «Me siento feliz de haber logrado este resultado ante mi público. Sabía que la gente estaba esperando y le puse toda la energía posible al sprint», comentó.
Mientras, Mojica ratificó que el triunfo en este Clásico fue obra del trabajo en equipo de Artemisa. «Uno solo no puede ganar una competencia como esta; sin ellos no hubiera sido posible, una vez más les doy las gracias a ellos», explicó el campeón, quien como premio también disfrutará durante una semana de uno de los confortables Peugeot 208 con que acompañamos el giro desde la arrancada en Guantánamo.
Mojica recorrió Cuba en 35:56.27 horas; 3:18 minutos más invirtió el santiaguero Pedro Portuondo para concluir en el segundo lugar del giro y en el escalón más bajo del podio final concluyó el tunero Jans Carlos Arias, a 3:43 minutos del líder.
Por equipos, Artemisa fue el campeón con acumulado de 106:43.49 horas. El premio de metas volantes se lo adjudicó el guantanamero Onel Santa Clara (24 puntos), y el de montaña fue a la cuenta del matancero Vicente Sanabria (29 puntos). Entre los menores de 23 años, el artemiseño Álvaro Soca fue el puntero, además de quedar quinto en la clasificación general individual.
Para Héctor Ruiz, director del Clásico y Comisionado Nacional de Ciclismo, la competencia fue exitosa y puede servir de preámbulo para que el próximo año regrese al calendario de la Unión Ciclística Internacional (UCI) como lo que fue en sus inicios: la Vuelta a Cuba, con carácter internacional. Peugeot, como siempre, estará entre los grandes animadores de ese espectáculo deportivo.