Uno de los mayores atractivos que encontramos a la hora de montar una motocicleta es la sensación de libertad. Veamos algunos destinos increíbles para viajar en moto.
Recorrer el mundo sobre dos ruedas es una experiencia maravillosa, pues su movilidad permite llegar a lugares insólitos, sentir el viento, la velocidad, a la par de estar en contacto directo con la naturaleza y el entorno que nos rodea.
La mejor forma de conocer estas sensaciones es durante un buen viaje, por lo cual hoy te realizamos una sugerencia de 5 lugares en el mundo que deberías conocer, para que tu experiencia sobre dos ruedas sea perfecta.
Ruta 66, ubicada en los Estados Unidos es considerada como una de las mejores rutas en moto y un ícono de la cultura americana, que permite conocer de una vuelta en motocicleta 8 estados desde Chicago hasta Los Ángeles, pues cuenta con una longitud de 3.940 kilómetros en la cual podrás disfrutar y sumergirte por completo en la cultura e historia estadounidense.
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Pero, si eres amante del mar y la naturaleza The Great Ocean Road en Australia es la opción perfecta, un lugar donde podrás ver desde las olas mundialmente famosas de Bells Beach hasta los 12 Apóstoles, atravesando selvas tropicales, volcanes y costas escarpadas en un recorrido de 243 km por la ciudades de Melbourne y Sydney .
El Passo de Stelvio es posiblemente uno de los puertos más famosos y espectaculares de los Alpes. En su origen servía para conectar Milán con el centro de Austria, pero desde 1919 es una costa italiana que discurre en paralelo a la frontera suiza. Este puerto de montaña famoso por su concentración de curvas, llega a los 2.757 metros de altitud, siendo el más alto de Italia y el segundo en Europa.
Por otra parte, si además de disfrutar las vistas y los bellos paisajes, sientes atracción por el riesgo, te invito a conocer The Cat and the Fiddle, traducido como la carretera y el violín, es una de las rutas más peligrosas de Inglaterra, siendo todo un desafío para los motoristas atravesarla disponiendo de poca visibilidad, sus cambios de rasantes y sus curvas, pero no por ello deja de ser una de las mejores experiencias, siempre que se realice de forma responsable y cuidadosa.
Viajar en moto no comprende solamente la euforia y adrenalina que se siente al correr a toda velocidad en ellas, también puede ser ese lugar donde te encuentras a ti mismo y te da paz. El Tíbet es una buena opción para aquellos que ven en estos viajes, su retiro espiritual.
Esta senda proporciona un camino lleno de antiguos templos, monasterios y palacios, con carreteras bien asfaltadas, pero con algún desvió de tierra hacia lo natural, que te permiten observar paisajes del Himalaya, pasando por templos tibetanos hasta llegar a los campos bases del Everest, ¿increíble no?