Por fin concluyó la expectativa por la llegada de los nuevos Lada Vesta a Cuba, cuando la pasada semana arribaron más 300 vehículos al puerto de La Habana. Excelencias tuvo una primera toma de contacto la misma tarde de su arribo, esta es nuestra experiencia. Veamos.
Este es un lote adquirido por Taxis Cuba, para su explotación como taxis, por ello también evaluaremos su capacidad para este trabajo. La inspección estática revela un salón espacioso, nivel de confort adecuado y un ajuste muy bueno. Viene con cierre centralizado, a distancia, espejos de mando eléctrico, airbags frontales, un maletero amplio y despejado.
Con apenas 12 km en el odómetro, nuestro ejemplar era un sedán –también hay SW de siete plazas– de cinco plazas y cuatro puertas. Viene equipado con el motor cuatro en línea de 1.6 L y 106 CV. Se acopla a una transmisión que puede ser manual, de cinco marchas, o automática. Cualquiera de ellas tiene esquema de tracción delantera. El nuestro estaba equipado con los cambios manuales.
Una vez en camino, el motor garantiza una muy buena movilidad, sin ser brillante. Los cambios son ajustados y uno se puede adaptar muy rápido “al ritmo” de este auto. En marcha, el Vesta nos deja sentir que está bien construido, sin traqueteos ni desajustes, un buen punto de partida para cualquier auto nuevo. Por supuesto, nuestra conducción fue tranquila, siendo un auto sin rodadura alguna, pero a velocidades entre 60 km/h y 80 km/h, el comportamiento fue muy bueno, estable y con buen “feeling” en la dirección. Los controles están bien agrupados, fáciles de ser encontrados. En la pizarra, tenemos cuenta-millas (total y parcial), velocímetro, tacómetro, temperatura, hora y voltaje producido en tiempo real. Son los necesarios para un conductor comprobar su auto, luego existen los excesos que impone el mercado.
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En la consola viene un equipo de audio básico, para el siglo XXI, pero muy cumplido para el trabajo que harán estos autos. No es un sistema multimedia: viene con CD de audio, ranura micro SD, puerto USB y radio. Permite, eso sí, conectar móviles por Bluetooth, algo imprescindible hoy día para un chofer. Entendido esto, hay que decir que la calidad del sonido es muy buena.
Por demás, viene equipado con llantas de hierro, no de aleación, favorables para el intenso trabajo del taxi, LED´s en el salón y, por supuesto, aire acondicionado. Estos autos permiten al servicio de taxis, por primera vez en muchos años, explotar vehículos totalmente nuevos. Esta realidad se ha hecho posible gracias, entre otras cosas, al sistema de arrendamiento aplicado hace algunos años, el cual ha permitido una elevada eficiencia del sistema de taxis.
