
Chevrolet llega a su centenario y una de las formas de celebrarlo es la presentación de los prototipos que le permitirán seguir adelante en esta competitiva industria. Luego de lograr poner en el mercado el Volt, sin dudas su mayor esfuerzo de los últimos tiempos, ahora muestra este Mi-ray, un roadster hecho en su mayoría de fibra de carbono y como un tributo a la herencia deportiva de la marca.
Destaca, además, el uso de aluminio, piel y otros metales, acompañado de una temática de iluminación en tono naranja y un diseño que parece envolver al conductor y copiloto. Las puertas tipo tijera le dan un toque dramático y sofisticado que complementa al sistema de propulsión 'mid-electric' con motores eléctricos y un motor cuatro cilindros que le dan un rendimiento de cerca de menos de 4 litros cada 100 Km.
El frente es, sin dudas, poderoso y muestra una reinterpretación de la imagen de Chevrolet. La doble parrilla está flanqueada por luces LED de nuevo estilo, mientras la facia evoca a los Corvettes del pasado y expresa el espíritu deportivo del Mi-ray. Por demás, la cabina luce rígida y ligera y parece envolver al conductor y copiloto, aunque está enfocada por completo al piloto. Los asientos asimétricos parecen flotar desde la puerta y la iluminación le da un toque de lujo. Los cojines y respaldos están conectados por una estructura de fibra de carbono y montados en un riel de aluminio.
El Mi-ray tiene, como ya dijimos, un sistema de propulsión que Chevrolet bautiza como ‘mid-electric’ que maximiza el desempeño y eficiencia. Funciona con dos motores eléctricos de 15-kW para una aceleración más rápida y sin emisiones en la ciudad. Además tiene una batería de iones de litio de 1.6-kWh que se recarga con energía del frenado y para un mayor desempeño cuenta con un motor de cuatro cilindros 1.5 litros con turbo-alimentador y transmisión de doble embrague. Incorpora también sistema Start-Stop; con todo ello los de GMC aseguran un rendimiento de hasta 27.16 km/l o, lo que es igual, 3.68 litros cada 100 km.