
Los hay que estaban bastante desilusionados con eso de llegar al siglo XXI y que los coches no vuelen. No os emocionéis, la cosa va a seguir así, aunque ya empezamos a dar los primeros pasos hacia ese tan deseado y peliculero futuro. El Aero-X de los californianos Aerofex es prueba fehaciente de ello. Se trata de una aeromoto que ya última su desarrollo estos días y que llegará al mercado en 2017.
La Aero-X no será barata, de hecho rondará los 85.000 dólares, unos 62.000 euros, más impuestos. Es el precio que habrá que pagar por disfrutar de un pedazo de ciencia ficción en el presente. Da cabida a un máximo de dos ocupantes, se eleva hasta a tres metros del suelo y su velocidad máxima es de 72 km/h.
Según la marca, en los últimos meses han estado solucionando problemas de control de estabilidad, aunque la Aero-X está casi lista para su comercialización. Se estima que los primeros pedidos se comiencen a aceptar en 2016 y que las primeras unidades se entreguen en 2017.
Ante un vehículo tan vanguardista surgen varias dudas: ¿será fácil de pilotar? ¿Habrá que sacarse un carné especial? ¿Necesitamos una pista para despegar y aterrizar? Pues algunas ya están respondidas. Empezando por la última, no, según Aerofex, no necesita pista para despegar o aterrizar, ya que se eleva de forma vertical.
Asimismo, el fabricante asegura que el Aero-X es tan sencillo de manejar como una moto: un solo fin de semana de prácticas nos hará capaces de conducir esta aeromoto y hacernos sentir como Luke Skywalker. Respecto a la licencia que necesitaremos, sigue siendo un misterio, aunque es de esperar que valga con un carné de moto. No en vano, no deja de ser una motocicleta en la que las ruedas han sido sustituidas por rotores en fibra de carbono. ‘Nada más’.