Entre los excelentes automóviles que ha producido Volkswagen a lo largo de los años, existen nombres contundentes que han impactado el mercado y quedado en la historia. Nuestro protagonista de hoy ha permanecido en un aparente segundo plano, sin titulares pomposos, pero con una constancia y éxito de mercado que lo haría figurar en los primeros planos de muchas otras marcas. Veamos la historia del Volkwagen Jetta.
El Jetta cuenta ya con cinco generaciones, todas las cuales fueron comercializadas bajo ese nombre en América del Norte y Sudáfrica. Su historia comenzó en 1980 y es, básicamente, una copia de la su ”hermano in vitro“: el Golf. Resulta que como este modelo está ”condenado“ a ser un Hatchback, Volkswagen toma la decisión de producir un sedán y otorgarle nombre propio. Han existido excepciones en la denominación a lo largo de su historia y, en Europa, la tercera generación fue denominada Vento, y la cuarta Bora. En México, es la quinta la que lleva la placa de Bora. Existen mercados con detalles curiosos como el de Argentina y Uruguay, en los cuales se llama Vento porque "yeta" significa "mala suerte", o España donde "Jeta" es la cara del cerdo. Pero curiosidades aparte se trata del mismo excelente modelo, de enorme fiabilidad, gran aceptación e imagen ideal para ser preferido del gran público.
En verdad el Jetta fue concebido para poder vender el Golf en el mercado estadounidense, pues allí los sedanes y familiares son mucho más populares que los Hatchback. Así, se lograba desvincular el producto y ofrecer un vehículo mucho más acorde a la línea tradicionalista de ese mercado. La estrategia de mercado dio resultado y el Volkswagen Jetta es el automóvil europeo más vendido en Estados Unidos y Canadá. Más allá de esto el Jetta logró consolidarse como un producto global mucho antes de que ese término adquiriese la connotación que hoy tiene. El Jetta funciona, y es exitoso, en mercados tan diferentes como México o Sudáfrica, donde resulta, incluso, más popular que el Golf.
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Por supuesto el Jetta compartió la mayoría de sus componentes mecánicos e interiores con el Golf de la generación correspondiente, básicamente la diferencia siempre ha radicado en la incorporación del baúl trasero. La primera generación tuvo su presentación mundial en el Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt, en septiembre de 1979, y su producción comenzó en septiembre de 1979, en la planta de Wolfsburg, Alemania. Su introducción en el mercado norteamericano fue a principios de 1980. Al igual que el Volkswagen Golf I fue diseñado por Giorgio Giugiaro.