Después de mucho batallar por hacerse accionista mayoritario y conseguir adueñarse de poco más del 50 % de las acciones del Grupo Volkswagen, Porsche ha quedado con una mano adelante y otra atrás. De esa manera, tanto esfuerzo quedó en nada y el propio Grupo alemán asumirá los pagos que comprometen a la marca deportiva de Esturgar, que suman, ahora mismo, 3 300 millones de euros en efectivo.
La inversión de Porsche, para hacerse del nuevo paquete de acciones del primer productor de automóviles de Europa ascendió a 100 000 millones de euros, una cifra que dejó temblando a la casa de Esturgar. Finalmente, los resultados económicos, a pesar de no ser malos, no cumplieron las expectativas y Porsche quedó sin posibilidades de asumir la deuda. La ultra famosa casa alemana ha quedado dentro del Grupo Volkswagen, bajo unos términos desconocidos.
Los directivos de ambas marcas se reunirán junto a funcionarios del estado de Baja Sajonia, para definir las condiciones finales de la fusión. De cualquier manera, el Grupo Volkswagen mantiene independiente el accionar de todos sus fabricantes que ahora suman diez: Volkswagen, Audi, Skoda, Seat, Bentley, Bugatti, Lamborghini, Porsche, Scania y Volkswagen Vehículos Comerciales.