Las noticias simpáticas y frescas merecen espacio. El Renault KWID Concept es un prototipo que difícilmente llegará a la producción, pero toda su idea, su imagen alegre resultan muy agradables en una industria saturada de alardes de potencia y poder. Se trata de un cochecito orientado a los jóvenes, con la característica de poder desplegar y hacer volar... ¡nada menos que un Drone! Veamos.
Completamente juvenil, con una imagen que me recuerda el aura de Cars –los populares dibujos animados- el prototipo de Renault sonríe por dondequiera que se le mire, dejando claro que su principal intención es una: transmitir alegría. Y con eso ya basta para reseñar un carrito que no ofrece mucho y que, casi de seguro, no llegará a la línea de montaje. Preparado para recibir un sistema de impulsión cien por cien eléctrico, con la toma de carga detrás del logo Renault, el motor a bordo resulta ser un 1.2 turbo de gasolina downsizing acoplado a una caja auto secuencial de doble embrague EDC. Aunque Renault no ofrece detalles del comportamiento de su Concept podemos asumir que con esta configuración y sus dimensiones el KWID debe resultar muy ágil.
En el interior, este vehículo cuenta con un aspecto de nido de pájaro y se ha trabajado para que los asientos estén suspendidos por encima de una base, al tiempo que incorpora climatización también en la parte trasera y el cuadro de instrumentos tiene forma de tablet integrada. Cuenta, entre los elementos de confort, con reglaje eléctrico de la banqueta delantera sobre un raíl central, apertura motorizada de puertas, iluminación LED y cambio de velocidades mediante botones cerca del volante se añaden a una pantalla táctil TFT instalada verticalmente que hace las veces de cuadro de instrumentos y permite también acceder a servicios on line.
Pero el ”show“ del KWID comienza cuando se abre la escotilla trasera giratoria del techo y se decide lanzar el Drone incorporado a bordo. El artilugio se puede manejar seleccionando uno de los dos modos disponibles, automático y manual. El primero utiliza una secuencia de pilotaje pre-programada y la localización con ayuda del GPS, mientras que el segundo permite controlar el funcionamiento a través de la tableta del vehículo. Este 'Flying Companion' como le llama Renault, permite acceder a múltiples tareas como obtener información sobre el tráfico, sacar fotos del paisaje o detectar obstáculos en la carretera. Renault ha insistido que al diseño de este vehículo ha contribuido el centro Renault Design de Italia y representa el segundo paso de la estrategia de diseño de la compañía.
Asimismo, el nuevo vehículo de la firma automovilística también tiene reglaje eléctrico de la banqueta delantera que se desliza sobre un raíl central, apertura eléctrica de puertas, iluminación LED y pantalla táctil TFT instalada verticalmente que hace las veces de cuadro de instrumentos.