
Unos días únicamente faltan ya para que el Salón de Ginebra abra sus puertas y cada vez son más las primicias mundiales que, según se anuncia, allí estarán. Tan solo Toyota, por citar un ejemplo, presentará varias de ellas con el prototipo Yaris Híbrido HSD, la variante monovolumen del Prius y el coupé FT-86, que lucirá la apariencia final del modelo de producción.
El coloso japonés, en definitiva, se vuelca con el futuro ecológico de la automoción: híbridos, híbridos enchufables, híbridos con pila de combustible… y por eso prueba ahora con los eléctricos. De ahí que a la feria helvética también llevará una versión 100 % eléctrica del pequeño iQ, apellidada EV.
No en vano Toyota explicó que el EV representa su visión a largo plazo con respecto a la movilidad sostenible en las distancias cortas, por lo cual este vehículo equipa un motor eléctrico en el eje delantero, basado en la tecnología Hybrid Synergy Drive, en tanto la batería de ión-litio de nuevo desarrollo que lo alimenta aparece alojada bajo el piso del coche entre ambos ejes para no limitar el espacio del habitáculo, bueno para tres pasajeros y un cuarto que deberá ser un infante, si queremos conservar su amistad.
Así pues, la compañía destacó que el EV combina la agilidad de un vehículo urbano compacto con la conducción fácil y silenciosa de un automóvil cero emisiones que es capaz de recorrer hasta 105 kilómetros sin tener que repostar. Aunque este prototipo se está probando actualmente en las carreteras europeas, su versión definitiva no será comercializada en el Viejo Continente hasta inicios de 2012 como parte de un programa de leasing (alquiler preventa), mientras ya se estudia la viabilidad de introducirlo igualmente en el mercado norteamericano y otras regiones.