
Skoda muda la cara, sí señor. ”Urbi et orbi“, para la ciudad y el mundo, en el Salón de Ginebra ha proyectado su imagen rejuvenecida: The New Power of Skoda (El Nuevo Poder de Skoda). Y no está mal, la verdad, pues con su nuevo logotipo y un revolucionario concept, el fabricante checo confirma que no se trata de un simple y alocado ejercicio de diseño, sino más bien de un proyecto serio que plasma los trazos y formas de sus futuros modelos.
Y es que justamente una visión de futuro es lo que encarna su prototipo VisionD, que ya luce el nuevo logo de la marca, con la flecha alada de mayor tamaño, un tono verde más vivo en el fondo y el borde cromado que le brinda un toque moderno.
Es así como sus líneas nítidas y elegantes nos descubren un vehículo compacto con aires de coupé, cuya fisonomía limpia y sobria transpira también cierta deportividad que realza su atractivo. Con un techo panorámico acristalado que cae suavemente hasta dibujar el portón trasero, el Skoda VisionD exhibe un frontal poderoso rematado con unos faros rectangulares, mientras a los costados aparece esculpido con unos pasos de rueda musculosos y unos voladizos casi minimalistas.
Ya en el interior, como es norma de la casa, el confort es notable gracias al espacio generoso; en tanto el color blanco se potencia hasta lo inimaginable, en la tapicería de los asientos, el volante y la información de su consola, donde cobra realce la pantalla multifunción central de grandes dimensiones.
De cualquier modo, aunque de momento no existen especificaciones técnicas sobre este prototipo, no sería nada descabellado que uno de los primeros modelos de producción que adopte su filosofía en el diseño sea el nuevo Octavia, que debería llegar a los concesionarios durante el 2012. Al fin y al cabo, tras 110 años de historia, está claro ya que la filial de Volkswagen pretende seducir al mundo con el Nuevo Poder de Skoda.