Nuestro concurso en Facebook con motivo del 14 de febrero nos permitió encontrar hermosas historias firmadas por enamorados del motor. A continuación les compartimos más vivencias de amor sobre ruedas.
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Un retrovisor, una mirada. Un roce a media luz. Dos siluetas encontradas. Un almendrón en el Café Fortuna. Así comenzó todo. |
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| Esta es una larga y bonita historia pero solo relato el comienzo para no cansar. Un buen día de diciembre de 2017 fui a pasar y convivir un tiempo a casa de unos amigos, tiempos difíciles para mí. Mientras entraba y salía cada día como rutina hacia mi trabajo veo que una nueva familia se muda al mismo vecindario, jamás pensar lo que el destino me preparaba. Resulta que una chica hermosa dentro de esa familia recién mudada iba a ser hoy quien es, el amor de mi vida. Aquí una prueba de que el roce hace el cariño: el vernos día a día y conocernos poco a poco fue el resultado de una invitación a descubrir lo que el destino nos había preparado. Temí que invitarla a salir en mi moto eléctrica fuera a ser un problema y al contrario me dijo: “recuerda que hoy al subirme a tu moto te estoy entregando mi vida, cuídame". Asombrado quedé y enamorado también. La historia continúa pero es larga, espero la imagen diga más. | 
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Dos puntos en el espacio: Apenas nada. Se acercan como diminutas partículas vistas desde un satélite. El recorrido no es fácil. Las contingencias del camino son múltiples y disímiles. Su locomoción funciona a partir de ser digeridos por una monstruosa ballena de metal rodeados de variadas partículas comprimidas. Una línea gris con parches es la vena en la que se mueven. El tiempo allí pareciera detenerse, eternizarse. A su paso la ballena vomita una manada de partículas. No hay nada visible que ate a las partículas protagonistas de esta historia. Una detenida, la otra hacia ella. Pero se acercan. Se encienden los luceros, la Tierra ya ha bailado lo suficiente y parece estar lista para dormir. Ellos no. La ballena por fin se detiene, y escupe por fin todo lo que lleva adentro. Cada vez más cerca. Se unen. Se aman. |
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"Hoy en la noche salió un autobús para el cine y habían escogido en la universidad a dos personas por grupo, y era tan evidente mi lucha por Yanice que el grupo nos escogió a ella y a mí. Al subir en el autobús nos sentamos uno al lado del otro. Recuerdo que ella estaba muy nerviosa, el chofer encendió el motor y el corazón de Yanice latió con más fuerza. Él estaba asomado por el balcón mirándola de forma amenazante y entonces le dije al oído: “Estás a tiempo de bajar y continuar con tu vida, esa que te está mirando, de lo contrario así como arranque este motor, arrancará tu vida conmigo”. Yanice agarró mi mano y se cerraron las puertas del autobús…" Basado en hecho reales. Se cambiaron los nombres de los protagonistas para proteger su indentidad. |
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