Después de soñar con prototipos anunciados por industrias, Michelin y General Motors venderán en 2024 neumáticos sin aire y sin peligro de recibir ponches.
Cuántas veces hemos salido a manejar un vehículo y apresurados para llegar a nuestro destino cuando de repente…boom…..pssssssss! Un ponche. A esa hora a ensuciarse las manos, sacar la goma de repuesto y llevar a cabo el cambio de neumático. Peor si es sobre una motocicleta, tendríamos que dirigirnos hacia la “ponchera” más cercana o utilizar los llamados “ponche frío”. Para poner fin a esta tarea tan molesta, las industrias realizan estudios para desarrollar neumáticos capaces de evitar ponches.
Por el año 2013, Hankook Tire, la compañía surcoreana, presentó iFlex, que consistió en un prototipo de ruedas con materiales ecológicos y un diseño geométrico que proporcionaban el rebote y elasticidad necesaria para evitar pinchazos. Más tarde en 2014, Michelin presentó un neumático compuesto por un cubo rígido conectado a la banda de rodadura por medio de radios deformables de poliuretano llamado X Tweel.
Hoy día, Michelin y General Motors anuncian que este proyecto sigue en pie con ‘Uptis’ (Sistema Único de Neumáticos a Prueba de Pinchazos), pese a que todavía es un prototipo, la comercialización está prevista para 2024. Y se realizaran los primeros test en coches reales a finales de este año.
Chevrolet será la encargada de testear la eficacia de esta nueva tecnología con una unidad de Chevrolet Bolt EV. Michelin afirma que el neumático cuenta con aspectos muy positivos respecto a las ruedas habituales: elimina el riesgo de pinchazos, reduce el coste en materiales y energía para la fabricación, aumenta la durabilidad y cambia la forma del neumático por completo al no necesitar llantas.
El sueño de Michelin es eliminar el tiempo perdido en la reparación de los pinchazos en los neumáticos. Con ‘Uptis’ aseguran que podrán ser reparados utilizando tecnología de impresión 3D. El objetivo final es desarrollar un neumático donde la rueda se considera un todo, con puntos de elasticidad y rigidez calculados para actuar como las ruedas actuales, con la ventaja de no sufrir pinchazos al no disponer de aire y utilizar una resina insertada de fibra de carbono.