El Volkswagen Golf VIII promete una verdadera revolución tecnológica, con una interfaz que permitirá maniobrar el auto como si fuese un smartphone.
Los clásicos siempre vuelven. Así que la octava generación del Volkswagen Golf llegará a las calles de Alemania en febrero de 2020, para extender su venta poco después a otros países europeos.
Aunque en principio la firma alemana anunció que presentaría el modelo durante el segundo semestre de 2019, decidió retrasar su arribo debido al meticuloso trabajo que está haciendo con el software. Uno bien esperado, pues se trata del lanzamiento más importante de Volkswagen para los próximos meses, con el permiso del flamante eléctrico ID.3.
No en vano, pese apostar por un diseño sobrio y continuista, como han dejado entrever sus fotos y bosquejos, el Golf VIII busca reinventarse por dentro y por fuera para seguir siendo un referente en el nicho de los compactos.
De ahí que traerá múltiples novedades, pero la gran revolución estará en su tecnología, una apuesta muy ambiciosa por parte de Volkswagen para que el nuevo Golf no tenga nada que envidiar a un smartphone, a partir de una interfaz que permita añadir de forma periódica nuevas funciones, mejorar equipamiento e incluso subsanar fallos o problemas a través de actualizaciones OTA (Over The Air).
Tampoco hay que perder de vista que el Golf VIII solo dispondrá inicialmente de carrocería de 5 puertas, dejando para más adelante una variante familiar, mientras que no será hasta finales de 2020 o incluso 2021 cuando asomen sus versiones de corte deportivo bajo las siglas GTI y R, y la híbrida enchufable GTE, pues el e-Golf no tendrá cabida ante la llegada de la familia eléctrica ID.
Concebido a partir de una versión actualizada de la plataforma MQB, denominada EVO, el modelo aumenta ligeramente sus dimensiones y gana aun más espacio interior, gracias a sus 5 centímetros extra de distancia entre ejes. En tanto, su carrocería adelgaza unos 50 kg para ofrecer también una aerodinámica mejorada.
Si bien, desestima la propulsión 100% eléctrica ante la llegada del VW ID, el Golf VIII sí estrenará las primeras variantes micro-híbridas con tecnología de 48V, asociado al motor 1.5 TSI con desconexión de cilindros. Todo para afianzarse como el compacto más vendido de Europa.