Hoy China es el mayor exportador de automóviles del mundo y trabaja fuertemente para dominar el mercado global de los vehículos eléctricos.
Los fabricantes de automóviles chinos se encuentran en fase de expansión rápida, están buscando exportar cientos de miles de vehículos eléctricos a todo alrededor del mundo. Según datos de Veson Nautical, publicados por la agencia de noticias británica Reuters, China tiene actualmente la octava flota de transporte marítimo más grande del mundo, con 33 barcos.
Sin embargo, para poder trasladar la creciente demanda, las empresas han encargado 47 barcos adicionales, lo cual representa un cuarto de todos los pedidos a nivel global. Tales esfuerzos posicionan a China como potencia en el transporte de vehículos, elevando su flota del 2.4% actual al 8.7% del mercado global.
Con sus planes agresivos de exportación, los empresarios automotores de China han incrementado notablemente su producción, que ha dado como resultado una serie de complicaciones logísticas y políticas, principalmente en Europa. A pesar de tener el dominio de la producción y exportación, las automotrices chinas enfrentan problemas al llegar a puerto.
Como puede verse, los vehículos se están acumulando en las instalaciones portuarias, afectando otras operaciones y convirtiendo a estos espacios en lo que llaman “parqueos de autos recién llegados”. Esto se debe, en parte, a la mala planificación del país de arribo, para la transportación interna del muelle hasta los concesionarios.
La entrada masiva de vehículos eléctricos chinos en mercados extranjeros, acentúa la necesidad de una planificación previa, más fuerte, por parte de los fabricantes automotores, en estrecha coordinación con los receptores.
La creación de redes de distribución mucho más efectivas en colaboración con empresas locales, podrían mitigar muchos de los problemas logísticos actuales.
La innovación continua y el compromiso con la sustentabilidad de China, a largo plazo serán los puntos claves en el mantenimiento del liderazgo de China en la industria automotriz de los vehículos eléctricos.
A medida que el mercado global evoluciona, las estrategias de exportación y distribución también deben adaptarse para asegurar, no solo la deseada expansión, sino también la aceptación en mercados internacionales cada vez más competitivos y regulados.