
Esta bella creación de la casa de Maranello, que vio la luz este mismo año, nació para sustituir el F430, que de por sí ya es un sueño. El mismísimo Cristiano Ronaldo, estrella del futbol internacional, quiere agregar a su colección un Ferrari 458 Italia, para reemplazar su Ferrari 599 GTB Fiorano que destrozó a principios de año en un túnel. El propio Luca de Montezemolo lo invitó al circuito privado de la marca para probar su posible nuevo juguete.
Es un biplaza, de color rojo por supuesto, que se caracteriza por unas interesantes líneas aerodinámicas más redondeadas que de costumbre. Imponentes son sus llantas de aleación de cinco rayos, las que dejan al descubierto los inmensos discos de freno, sobre todo en el tren delantero. Otro punto interesante son las nuevas ópticas, con el nuevo sistema de luces tipo led.
Lo mueve un poderoso motor V8, ocho cilindros en V, con un desplazamiento de 4.5 litros, doble árbol de levas en cabeza (DOHC) y cuatro válvulas por cilindro (32 en total). Entrega una potencia de 570 CV a 9 000 rpm y un par motor máximo de 540 Nm a 6 000 rpm.
Transmite al tren trasero por medio de una caja semiautomática de siete velocidades y doble embrague que le permite hacer los cambios de marcha en apenas 0.06 segundos. La velocidad tope del Ferrari 458 Italia es de 335 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en solo 3.4 segundos.
Además de su excelente mecánica, cuenta con mucha electrónica que los de Maranello ya probaron en la F1, como son: diferencial electrónico, sistema de control de tracción mejorado y el ya mencionado cambio de doble embrague. El peso homologado es de 1 380 kilogramos, para una relación peso potencia de 2.42 kilogramos por cada caballo de fuerza.