Contra viento y marea. Kia Motors, la filial del fabricante surcoreano Hyundai, solventó con éxito el agravamiento de la crisis financiera mundial y registró en septiembre un volumen global de ventas de 110 431 unidades, lo que supone un aumento del 2,7 por ciento equiparado con el mismo período de 2007.
Durante los primeros nueve meses del año la multinacional asiática comercializó 1,06 millones de vehículos en todo el mundo para consignar un incremento del 14,4 por ciento en comparación con ese lapso del ejercicio precedente.
Por regiones, Kia distribuyó 24 322 unidades en su mercado local en septiembre para obtener un alza del 19,5 por ciento, mientras que en China sus entregas totalizaron las 11 012 unidades (+10,9%). En contraste, decayeron sus índices de ventas en Europa y Norteamérica, donde las cifras descendieron hasta 28 901 (-12,4%) y 21 155 unidades (-22,8%), respectivamente, debido a la agudización de la crisis crediticia y la tendencia a la baja en los principales mercados automotrices.
No obstante, la corporación logró mantener un balance positivo en lo que va de año con 229 171 entregas en Sudcorea (+16,3%) y 268 595 en Europa (+7,8%), de modo que solo Norteamérica se reafirmó como un mercado en franca depresión con 258 338 matriculaciones nuevas (-0,4%).
La firma resaltó en un comunicado que a este aumento de las ventas mundiales ha contribuido la buena evolución del modelo Cerato, así como del Rio y del todoterreno Sportage. El vicepresidente de la División de Negocio Internacional de la compañía, Hyoung-Keun Lee, destacó la fortaleza de Kia en el mercado mundial, a pesar de las difíciles condiciones económicas.