
Volkswagen cumple su palabra. Cómo no. Había anunciado su intención de apostar por la movilidad cero emisiones y ya ha lanzado al ruedo la versión eléctrica de su modelo Up!, que presentó en septiembre durante el pasado Salón de Frankfurt.
La puso a la venta en Alemania este otoño para plantar cara a rivales como el Nissan Leaf y el Renault Zoe, antes de sacar a la luz un hatchback de mayor calado como el e-Golf en 2014. Y lo cierto es que esta variante ecológica del pequeño urbanita es tan confortable y divertida como el modelo convencional, y más refinada si se quiere, aunque por fuera se vea como otro Volkswagen Up! cualquiera.
El e-Up!, de hecho, no es ningún timorato vehículo con pila de combustible, toda vez que reemplaza al motor naftero de 74 CV por uno eléctrico de 81 CV, adosado a una batería de ion-litio y 18.7 kWh que ocupa el lugar del tanque de gasolina. Así que brinda exactamente el mismo espacio para los pasajeros y su maletero sigue ofreciendo 250 litros de capacidad para el equipaje.
Según la firma de Wolfburg, además, es capaz de alcanzar los 130 km/h como velocidad tope. Gracias a su torque ultraligero acelera de cero a cien más rápido (en 12.4 segundos) y puede recorrer hasta 150 kilómetros con una sola carga, siendo nueve horas el tiempo necesario para reasbatecerse a full en un enchufe común y corriente.
El Volkswagen e-Up! (al igual que el e-Golf) viene con tres modos de conducción: Normal, Eco y Eco+, que progresivamente limitan la potencia del motor, los valores del torque y las funciones del vehículo para incrementar su autonomía, optimizable igualmente gracias a su sistema de frenado regenerativo, que le permite explotar al máximo la energía cinética.
Ciertamente sus dimensiones siguen siendo compactas, pero está claro que el tamaño no lo es todo, especialmente para aquellos que aprecian el mérito de un minicoche económicista ideal para los trazados urbanos como esta versión eléctrica del Up!. Sin duda, otra propuesta acertada de Volkswagen.