Como una alabanza a un espacio geográfico tan peculiar, y protagonista, además, de disímiles historias de descubrimientos, diversión y esparcimiento, arriba a la industria del ocio marítimo el MSC Seaside, diseñado especialmente para surcar las aguas del Caribe.
La nave, con capacidad para 5 179 pasajeros, tiene 323 m de eslora y 41 de manga, 153 516 toneladas, 2 066 cabinas y 20 pisos. Todas estas características se unen para exponer una embarcación que presenta una considerable gama de entretenimientos.
La naviera MSC Cruceros –a la cual pertenece el MSC Seaside con su puerto de base en Miami– apostó por este barco, uno de los de mayores dimensiones de esta empresa (solo superado por el MSC Meraviglia), con la revolucionaria idea de defender el concepto de diseño de un crucero pensado para el Caribe.
“Los cruceros se construyen para toda época del año y cambian los destinos según la temporada. El Seaside es el primero enfocado únicamente para navegar por el Caribe”, puntualizó Javier Massignani, director ejecutivo de MSC Cruceros en Argentina.
A bordo del MSC Seaside se puede encontrar desde el Metropolitan Theatre, el Miami Casino, el Champagne Bar, la Crepería y Heladería Venchi, el MSC Aurea Spa, el MSC Gym, hasta restaurantes con diversidad de propuestas culinarias, una pasarela de cristal sobre la que caminar a 40 m sobre el mar, un paseo marítimo que rodea toda la nave (el más ancho construido a bordo de un barco), un simulador de fórmula 1 o un parque acuático interactivo, por mencionar solamente algunos ejemplos.
El MSC Seaside –también el barco más grande construido en Italia– constituye toda una maravilla dentro de este universo de la industria marítima que cada vez propone y expone mejores embarcaciones, productos, diseños y servicios.
