
Kuandinsky es uno de los puentes de carretera más peligrosos del mundo. Está en Rusia y cruzarlo es toda una aventura para peatones y vehículos.
Si existiera un premio al puente más precario, el de Kuandinsky estaría nominado y se llevaría las palmas por peligrosidad y popularidad.
Lo curioso es que “el puente”, no está apto para la circulación, ni es oficialmente un puente, a pesar de que lo usan diariamente más de 1 500 personas que viven en la zona, además de los vehículos ligeros y pesados que van dejando su huella.
El puente tiene su embrujo y se ha hecho famoso por los videos que se publican en las redes. Desde curiosos que viajan largas distancias para cruzarlo y admirar sus bellezas naturales, hasta los más atrevidos e intrépidos, que desafían el peligro con sus motocicletas o autos y luego publican sus proezas con gritos de euforia como si se tratara de deportes extremos.
Atravesarlo es casi una hazaña porque su estado constructivo es lamentable y las condiciones climatológicas son extremadamente difíciles en un lugar donde los inviernos son bien crudos. Y para rematar, es muy estrecho, tiene 570 m de largo y su seguridad es nula: no tiene pasamanos, solo la estructura metálica cubierta con viejos maderos que ya dan señales de deterioro. En ocasiones, los conductores se han visto obligados a colocar objetos para cubrir los agujeros y seguir la marcha.
Precario y escalofriante son los adjetivos que mejor califican al puente Kuandinsky que atraviesa el río Vitim, en Rusia, en el área de Kalar en la región montañosa de Trans-Baikal, cerca de la frontera con Buriatia. Se comenzó a construir en los años 80, para un tren que nunca llegó a pasar, y la obra nunca se terminó. Hace más de 30 años está en un total abandono.
Pero si a usted le gustan los retos, no pierda la oportunidad, aventúrese. Y por increíble que parezca no hay reportes de accidentes en él.